Los lectores de tarjetas, los monederos móviles y los pagos de circuito abierto se han convertido en imprescindibles para las máquinas expendedoras modernas. Abren la puerta a más ventas, atraen a clientes nuevos y proporcionan comodidad.
Pero los gestores que mejor conocen este negocio, los que gestionan cientos o miles de máquinas, han aprendido que un sistema es la base silenciosa de sus ingresos: el circuito cerrado.
En toda Europa, especialmente en mercados como Francia e Italia, las soluciones de circuito cerrado como Coges MyKey siguen accionando las ventas más consistentes, predecibles y rentables.
Veamos por qué.
Qué significa «circuito cerrado»
En términos sencillos, un sistema de circuito cerrado mantiene todo el ciclo de pago dentro de su negocio.
Los usuarios recargan sus tarjetas o etiquetas RFID (MyKey, MIFARE o LEGIC) que solo funcionan en sus máquinas. Ese crédito permanece dentro de su red, generando ingresos que le pertenecen íntegramente a usted, sin bancos, sin procesadores externos, sin costes externos.
Por el contrario, los pagos de circuito abierto (como las tarjetas bancarias o los monederos móviles) dependen de redes externas para cada venta. Eso significa comisiones por transacción, tiempos de aprobación y dependencia de Internet.
El 100 % de los ingresos se queda en su bolsillo
Esta es la razón más poderosa por la que los gestores no hacen renuncia al circuito cerrado: cada céntimo de cada venta se queda en su sistema.
La mayoría de las adquisiciones en máquinas expendedoras son de 2 €. Incluso una pequeña comisión bancaria puede borrar miles de euros de beneficios anuales. Con el circuito cerrado, ese dinero no va a ninguna parte. Se queda en su negocio, valorizando con cada adquisición.
ⓘ ¿Sabías que…? Una comisión del 2 % sobre 1 € puede sonar pequeña, pero para una flota que vende un millón de cafés, eso supone 20 000 € anuales perdidos en comisiones bancarias.

Cobras antes de vender
Los sistemas de circuito cerrado funcionan con crédito precargado. Cuando los usuarios recargan sus tarjetas, etiquetas o MyKey, ese saldo se convierte en tus ingresos al instante, incluso antes de que realicen una adquisición.
Esto proporciona a los operadores una ventaja inmediata en términos de caja. No hay que esperar a las liquidaciones o aprobaciones bancarias: sus máquinas generan ingresos incluso antes de realizar una venta.
Por eso, el circuito cerrado no es solo un sistema de pago. Es un
Funciona sin conexión
Todos los gestores tienen máquinas en localidades donde Internet no es fiable: fábricas, hospitales, escuelas, áreas rurales. Cuando los terminales de circuito abierto pierden la conectividad, dejan de funcionar.
El circuito cerrado no depende de Internet. Funciona sin conexión, elaborando cada depósito de forma local.
Sencillo para los lugares de trabajo y los usuarios
Los lugares de trabajo siguen siendo uno de los segmentos más importantes del negocio de las máquinas expendedoras, y el circuito cerrado está diseñado para ellos.
Los empleadores suelen querer ofrecer descuentos o productos gratuitos. Los gestores pueden asignar créditos, aplicar límites o crear grupos de usuarios directamente a través del sistema de circuito cerrado. Es automático, limpio y eficiente.
Para los usuarios, es aún más par. MyKey vive en su llavero, siempre listo para usar. Sin teléfono, sin aplicación, sin contraseña: solo hay que insertar la llave y disfrutar.
Por eso, en el sur de Europa, el circuito cerrado no es una característica adicional. Es parte de la secuencia diaria.

El poder silencioso detrás de las ventas fiables
Todos los gestores demandan lectores de tarjetas y pagos móviles, ya que atraen a los clientes y amplían la accesibilidad. Pero el circuito cerrado sigue siendo el guerrero silencioso detrás de la rentabilidad de las máquinas expendedoras.
Por eso, los gestores experimentados no ven el circuito cerrado como una «tecnología antigua». Lo ven como la base de un negocio de máquinas expendedoras que realmente funciona.
¿Le interesa saber más sobre las soluciones de circuito cerrado de Coges? No dude en ponerse en contacto con nosotros.