Si has trabajado con Stéphane, Hervé o Morgan, ya lo sabes: son el tipo de equipo que hace las cosas sin darles importancia.
Si aún no los conoces, esta es tu oportunidad.
¿Quiénes son?
Son el equipo que lo prepara todo, resuelve los problemas difíciles, atiende el teléfono y te acompaña antes, durante y después de la instalación. El tipo de personas que quieres tener a tu lado.
Todos ellos ven las cosas desde el punto de vista del cliente
Una cosa es conocer el producto y otra muy distinta es comprender lo que supone gestionar máquinas expendedoras a diario.
Stéphane lleva más de dos décadas en Coges. Eso significa que ha visto todo tipo de configuraciones, solicitudes y cambios en el mercado. No se deja intimidar por las necesidades complicadas: ayuda a los operadores a descubrir qué es lo que funciona, tanto si están pasando de las monedas a las tarjetas como si están pensando en la telemetría por primera vez.
Morgan proviene del mundo de los operadores. Conoce la realidad cotidiana: máquinas que deben funcionar, pagos que deben realizarse y sistemas que no deben interferir. Por eso es directo. Primero habla de negocios y luego de productos.
Hervé es el técnico. Trabaja en el problema hasta que se soluciona y se asegura de que no vuelva a ocurrir.
«Cuando el sistema funciona perfectamente y el cliente vuelve a sentirse seguro, esa es la mejor parte»,
añade Hervé. Y todos comparten algo más: realmente disfrutan de este trabajo.
Sus funciones son diferentes, pero piensan igual.
Lo que hace que este equipo funcione es que todos se centran en lo mismo: escuchar y facilitar la vida a los operadores.
Puede que primero conozcas a uno de ellos. Pero, entre bastidores, están en contacto constante, compartiendo lo que funciona, lo que no y cómo pueden mejorar el próximo trabajo.
«Siempre estamos en contacto», dice Stéphane. «Así es como nos aseguramos de que el trabajo se haga y el cliente quede satisfecho».
Son el tipo de personas a las que los clientes realmente vuelven a llamar
A nadie le gusta perseguir al servicio de asistencia o recibir respuestas vagas. Por eso nuestro equipo en Francia lo mantiene sencillo.
Te dirán lo que es posible. Lo que no lo es. Lo que funciona mejor con tu configuración. Probablemente por eso la mayoría de sus relaciones con los clientes se mantienen, algunas durante años.
«Hablamos con sinceridad. Y escuchamos», afirma Stéphane. «Eso es lo que hace que la gente vuelva».
Hacen que Coges funcione, en la práctica, no solo sobre el papel
Podemos hablar de sistemas todo el día: telemetría, pagos sin efectivo, integración. Pero sin personas como Stéphane, Hervé y Morgan, no llegaríamos muy lejos.
Ellos son la razón por la que nuestros clientes en Francia siguen con nosotros. Porque, al final, lo que importa es esto: cuando descuelgas el teléfono, al otro lado hay alguien que te conoce y conoce el trabajo.
«No se trata solo de las máquinas», dice Hervé. «Se trata de ayudar a alguien a solucionar un problema que le está costando tiempo o dinero. Eso es lo real».
Es sencillo: les gusta lo que hacen
«Me gusta que podamos ayudar a mejorar el trabajo diario del operador», dice Stéphane.
«Es satisfactorio formar parte de esa evolución, de la moneda a la tarjeta, de la desconexión a la conexión».
«Cada día es diferente», añade Morgan. «Conoces a gente, aprendes cómo trabajan y encuentras formas de facilitarles las cosas, de ahorrarles dinero. Eso es lo que me gusta: el impacto práctico».
«Resolver problemas, arreglar sistemas, volver a poner las cosas en marcha: eso es lo que me gusta», dice Hervé. «Y cuando el cliente te da las gracias, eso es lo mejor».